Las expectativas ciudadanas con respecto al [[sistema sanitario]] son cada vez más altas; el [[ciudadano]] es más exigente y está más informado. Es difícil establecer el límite a las demandas de nuevas prestaciones porque el concepto de [[salud]] y [[enfermedad]] está relacionado con los progresos de la [[medicina]] y con las expectativas sociales, conceptos ambos que están en expansión, lo que hace que este límite se encuentre actualmente difuminado.