Show pageBacklinksExport to PDFBack to top This page is read only. You can view the source, but not change it. Ask your administrator if you think this is wrong. Las comparaciones son odiosas: el refrán lo recuerda o lo dice normalmente quien resulta perjudicado en la confrontación, en el careo. Pero debido a la condición humana -[[orgullo]], [[competición]] y [[envidia]]-, el deporte de la evaluación, de la superación del vecino, comienza en la familia, entre hermanos, continúa en la escuela y la universidad, entre compañeros, y culmina en la empresa, entre colegas. En ocasiones, los exámenes, las calificaciones y las certificaciones son las únicas vías para elegir a los más preparados para una tarea. Pueden parecer injustos en una sociedad que aspira a la utópica igualdad, pero hasta no hace mucho los métodos de selección se basaban en la fuerza o en la sangre. Ahora predominan, al menos en algunos ámbitos y países, las destrezas, el esfuerzo personal y la inteligencia. El progreso económico y científico ha sido y sigue siendo impulsado en gran parte por la comparación: un coche que corre más y consume menos, un detergente que lava más blanco o un fármaco más eficaz y seguro que su predecesor. La medicina avanza también a golpe de valoraciones y clasificaciones. Buena parte de los estudios que se publican comparan fármacos, procedimientos y dispositivos. Sus resultados orientan en la toma de decisiones en salud, dirigida a ofrecer el tratamiento más adecuado y económico, tras evaluar los riesgos y beneficios de cada alternativa. Es la base de la conocida medicina basada en la evidencia, enfocada a comparar la efectividad entre intervenciones médicas, mediante ensayos clínicos controlados aleatorizados y revisiones sistemáticas o metanálisis. Como en las competiciones deportivas, y salvando las distancias vitales entre un juego y una terapia, las comparaciones directas ayudan a resolver las dudas sobre la eficacia, seguridad y costes de las intervenciones. Con sus matices e imperfecciones, iniciativas como la Colaboración Cochrane o el movimiento Choosing Wisely –Compromiso por la Calidad de las Sociedades Científicas en España-, o la que recogemos en el reportaje Reversiones médicas: terapias que llegaron y no debieron quedarse van desbrozando el accidentado terreno de las opciones clínicas, sembrado de presiones empresariales, intereses corporativos e inercias profesionales. Lejos de considerarlas como inamovibles, son más bien, de modo parecido a los protocolos clínicos, referencias que apuntalan unas decisiones no siempre fáciles y que, por el dinamismo de la investigación y la medicina, están sometidas a la evaluación continua. orgullo.txt Last modified: 2025/05/13 02:22by 127.0.0.1